Una de las grandes ventajas que nos ofrecen los avances, tanto tecnológicos como científicos, en cualquier campo o ámbito que se tercie, es la de incorporar nuevas técnicas y formas de trabajo para realizar diferentes procedimientos, o bien mejorar en gran medida aquellas técnicas ya existentes.
Así pues, para obtener un mismo resultado podemos optar entre varios y diferentes procedimientos mediante el empleo de determinadas herramientas, las cuales facilitarán todo este proceso.
Uno de los elementos o herramientas que goza de muy buena popularidad en la actualidad es el aerógrafo, el cual se emplea para realizar determinados procesos de maquillado en muy diferentes ámbitos, como puede ser el caso de la caracterización profesional en la cual se pueden obtener resultados extremadamente increíbles, en el caso del body paint o face-painting (pintado de la cara únicamente), y también en el campo del maquillaje tradicional.
Las herramientas y productos que existen en la actualidad permiten la realización de trabajos con un acabado muy preciso, realista e impresionante en el cual, evidentemente, va a tener una grandísima importancia la mano o habilidad del maquillador, maquilladora, o del caracterizador o caracterizadora profesional.
Es en el ámbito de la caracterización profesional donde se requieren mayores "dotes artísticas" o habilidad para recrear sobre la piel de una persona una determinada textura, forma o apariencia ya que, por ejemplo, se deberá representar la piel de un anfibio o reptil, el rostro de un león, o una imagen similar a la de un personaje de película.
En cualquier caso, la práctica y la experiencia serán aquellos puntos que podrán convertir a cualquier profesional de la caracterización y el maquillaje en unos expertos o expertas en este tipo de trabajos, los cuales cuentan con una amplia demanda en muy diferentes ámbitos de la sociedad.
¿Que es el maquillaje con aerógrafo?
El maquillaje con aerógrafo, como su nombre indica, supone una técnica conocida actualmente (aunque su historia se remonte a muchos años atrás), que supone maquillar la piel o el cuerpo sin tocarla, donde el único vehículo que existe es el aire.
Podríamos decir que este maquillaje es lo que se conoce hoy en día como el maquillaje de “alta definición” y es que es una forma de perfeccionar al máximo el maquillaje.
Lo primero, ¿qué es un aerógrafo?
Si hasta este momento no conocíamos este tipo de técnica dentro del mundo del maquillaje y de la caracterización profesional, lo primero que deberemos saber es qué es un aerógrafo.
Un aerógrafo es una herramienta neumática, es decir, funciona gracias al aire comprimido, que permite crear una finísima lluvia de minúsculas gotas de pintura, barniz, cualquier revestimiento o, en el caso que nos ocupa, maquillaje. Este tipo de herramienta es ampliamente utilizada en el campo de trabajo de la pintura, bien sea en talleres de pintado de diferentes elementos (carrocerías de vehículos, piezas industriales, rotulaciones...) como en el campo artístico, en el que bien encaja el arte del body painting o face-painting empleados tan a menudo en el mundo de la caracterización profesional.
En cuanto a los tipos de aerógrafos, podremos encontrar dos diferentes, siendo uno de ellos el adecuado para el asunto que nos ocupa: aplicar pintura o maquillaje sobre la piel de una persona. Este tipo de aerógrafo se compone, por una parte, de un lápiz que realiza las funciones de atomizador y que será el encargado de convertir el producto que queremos aplicar en una finísima lluvia de gotas microscópicas; y por otra parte de un pequeño recipiente que contiene la pintura o el maquillaje que emplearemos durante nuestro trabajo. Este tipo de aerógrafos son los que permiten trabajar cómodamente a pequeña escala gracias a su gran manejabilidad y precisión en el trazo, de forma que con ellos se pueden crear y representar hasta los más mínimos detalles de cualquier textura o imagen. El otro tipo de aerógrafo existente se trata de una herramienta mucho más grande y pesada enfocada al ámbito industrial.
Dentro del tipo de aerógrafos que nos interesa podemos encontrar, a su vez, diferentes opciones. El funcionamiento de este elemento es bastante simple, ya que se trata de expulsar la pintura o el maquillaje a través de una pequeña abertura mediante la acción que ejerce el aire comprimido. Para conseguir expulsar el producto se debe presionar una palanca o gatillo, de forma que cuanta más presión se ejerza, mayor cantidad de producto se expulsará.
Las diferencias dentro de este tipo de aerógrafo se centran en el control que se puede ejercer tanto en la cantidad de aire que se expulsa, como en la cantidad de pintura o maquillaje. Así pues, encontraremos aerógrafos que solo permiten controlar el aire que sale mediante el accionamiento del gatillo y que son llamados de acción simple; aerógrafos que permiten controlar tanto la cantidad de aire como de pintura o maquillaje bien de forma independiente (doble acción independiente), o bien de forma simultánea (doble acción); o los más avanzados que funcionan mediante una turbina que gira a gran velocidad y que permiten realizar los trabajos de mayor detalle y precisión.
Por lo general, dentro del mundo del maquillaje y de la caracterización se utilizan aquellos aerógrafos que permiten controlar el flujo de aire y de material, es decir, los de doble acción independiente, ya que permiten un mayor control sobre la cantidad de producto a aplicar y, con ello, una mayor precisión en el acabado final, aunque también se realizan trabajos con los de simple acción.
Como ya hemos comentado, los aerógrafos funcionan gracias al aire comprimido que los atraviesa y que hace que se expulse el material a aplicar, por ello cuentan con un pequeño compresor unido al lápiz mediante un fino tubo o manguera.
¿Como son los equipos para maquillar con aerógrafo?
Estos equipos se suelen componer de un rociador o una manguera donde se le introduce el color o las diferentes bases de maquillaje y es donde sale el aire.
Lo normal, es que las bases de maquillaje deban de fluir con normalidad por el comprensor sin ningún tipo de problema, pero es cierto, que no todas las marcas son las mismas y hay algunos maquillajes que no pasan por el compresor con normalidad debido a la textura o a la marca con la que estamos trabajando.
A diferencia de los maquillajes tradicionales que se suelen aplicar con brochas o pinceles, el aerógrafo, puede ser utilizado por distintas personas, pues no toca la piel y por tanto gana mucho en higiene. Además, a diferencia del tradicional como hemos dicho, reduce las arrugas y elimina cualquier tipo de mancha o rodal que pueda producir el tradicional.
¿Con que se aplica el maquillaje con aerógrafo?
Como hemos dicho se compone de una pistola o un compresor donde sale el aire, a este se le añade unas bases de maquillajes o bien podríamos decir unos pequeñísimos pigmentos que nos hará maquillar la zona.
El fino tamaño del aerógrafo es lo que nos hace que el acabado sea tan perfecto, natural y profesional y además, logre eliminar por completo las manchas, el acné los poros o cualquier tipo de rodal que con el maquillaje tradicional no logramos hacer.
Un profesional maquillador que trabaja con aerógrafo siempre precisará para su trabajo de un compresor, una manguera o pistola de aire el equipo para limpiarlo y por supuesto los conjuntos de maquillaje.
Los orígenes de la técnica del maquillado con aerógrafo
Pese a que hablamos sobre esta técnica de maquillado y caracterización como algo novedoso y totalmente revolucionario, lo cierto es que no es así. Por una parte, el aerógrafo como herramienta de pintura cuenta con más de 100 años a sus espaldas, ya que, a finales del siglo XIX, en 1893, fue creado por el famoso pintor acuarelista Charles L. Burdick como solución a la necesidad de aplicar varias capas de pintura sin que la tonalidad aplicada en un primer momento se viera afectada.
Sí que es cierto que a lo largo de todos estos años el aerógrafo ha sufrido mejoras y avances en cuanto a su diseño y funcionamiento, pero tampoco pensemos que los cambios han sido revolucionarios o extremadamente drásticos. En realidad, y a excepción de ciertos tipos de aerógrafos de más reciente introducción, la esencia de la herramienta sigue siendo la misma, variando tan solo los materiales empleados en su construcción y la formulación de los productos a aplicar con él.
Centrándonos ahora en el campo del maquillaje, el uso de esta herramienta tampoco es algo que haya surgido en los últimos tiempos. En sus inicios empezó a ser empleado en producciones cinematográficas de cierta importancia, como por ejemplo en la primera película de Ben Hur que data del año 1925 y que permitió la aplicación del maquillaje a todo el personal de reparto de una forma rápida y práctica. Realmente, la aplicación de esta técnica en aquellos tiempos tan solo se limitaba a producciones puntuales.
Tiempo después, entrada ya la década de los 70, comenzó de nuevo el auge del uso del aerógrafo para la aplicación de maquillaje y, una vez más, el mundo cinematográfico era el responsable de ello, pero además empezó a producirse su expansión fuera de este campo llegando hasta otros sectores profesionales como la televisión o el teatro.
A día de hoy, el maquillado con aerógrafo se trata de una técnica empleada en determinadas situaciones gracias a las ventajas que ofrece, y que más adelante comentaremos. Otro motivo por el cual esta técnica se encuentra en unos de sus mejores momentos, y que ya hemos comentado anteriormente, es la proliferación de los trabajos de caracterización profesional.
Durante el siglo XX, la inmensa mayoría de los trabajos de este tipo quedaban restringidos, una vez más, al mundo de las producciones cinematográficas o del teatro. Una de las mejores formas de cambiar el color de la piel era pintándola y, para ello, nada mejor que el uso del aerógrafo y de pintura especial para este menester.
En la actualidad, gracias a la innumerable cantidad de situaciones en las que se necesita realizar una caracterización de gran nivel (determinados trabajos, celebraciones festivas, espectáculos...), y a la consolidación de la figura del caracterizador profesional, el aerógrafo es una herramienta muy solicitada.
¿Se puede aplicar cualquier maquillaje o pintura con un aerógrafo?
Algo que se debe tener en cuenta es que, si deseamos utilizar esta técnica, deberemos emplear materiales adecuados para ella. Los maquillajes y pinturas que se utilizan en el maquillado con aerógrafo y en la caracterización son productos que cuentan con unas determinadas características para este uso.
Lo principal y más importante es que, evidentemente, la base de maquillaje que se emplee sea líquida, de lo contrario no será capaz de fluir a través del pequeño orificio del aerógrafo. Diversos fabricantes cuentan con bases líquidas especialmente diseñadas para ser utilizadas con aerógrafo, y se caracterizan por tener unos pigmentos infinitamente pequeños capaces de fluir a través de la herramienta sin obstruirla.
En cuanto a la pintura, existen en el mercado productos expresamente diseñados para ser aplicados en la piel y permanecer en sobre ella durante horas sin que cause daño alguno, además de contar con las mismas características que las bases de maquillaje anteriores, es decir, ser extremadamente finas y fluidas.
Ventajas y desventajas del maquillado con aerógrafo
Como ocurre con cualquier cosa y en cualquier ámbito, es realmente difícil encontrar algo que sólo nos ofrezca ventajas, pero no por ello quiere decir que ese algo no se deba tener en cuenta o no sea válido. Tan solo deberemos conocer estos aspectos para saber en qué tipos de trabajo resultará más adecuado el empleo de esta técnica.
Ventajas del maquillaje con aerógrafo
Cuando se realiza un proceso de maquillado de manera tradicional, se emplean diversos elementos que entran en contacto con la piel de la persona sobre la cual se está trabajando, como esponjas o brochas. Lo mismo ocurre cuando se aplica pintura en una caracterización mediante cualquier otra técnica.
Sin embargo, cuando se utiliza un aerógrafo no existe contacto alguno entre la piel de la persona y la herramienta, por lo que no se hace necesario contar con material de maquillado o pintura diferente para cada una permitiendo realizar un trabajo mucho más rápido y con un menor número de materiales.
Otra ventaja que presentan, y a la cual ya hemos hecho referencia anteriormente, es que gracias a su fina textura se pueden conseguir unos acabados finos y precisos que, con cualquier otro método, serían prácticamente imposibles de conseguir.
En cuanto a la duración del maquillaje, es posible que se haya escuchado alguna vez que un trabajo de maquillado con aerógrafo es menos duradero que uno realizado de modo tradicional. No existe ningún factor que marque la diferencia entre uno y otro método a excepción de la calidad de material utilizado y, evidentemente, que ese material sea apto para la piel de la persona sobre la que se va a trabajar y también que sea capaz de soportar las condiciones ambientales, como el calor y la humedad. El uso de un producto de calidad, tanto con un método como con otro, ofrecerá un resultado duradero.
De media, el maquillaje con aerógrafo suele durar unas 16 horas, además de ser más resistente al roce que los maquillajes tradicionales.
Desventajas del maquillaje con aerógrafo
Evidentemente, no todo iba a ser bueno dentro de esta técnica, y las desventajas son aspectos que se deben conocer para saber cuándo va a ser la situación adecuada para aplicar este tipo de maquillaje.
En primer lugar, la cobertura que ofrece el maquillaje con aerógrafo no es tan completa en comparación con la que ofrece el maquillaje tradicional. Debido a ello, se nos presentarán mayores dificultades a la hora de disimular aquellos defectos que queremos eliminar, tales como ojeras, arrugas, alguna cicatriz...
Otro aspecto problemático que se presenta es el hecho de que el tono que va a ofrecer el maquillaje va a ser siempre el mismo, independientemente de la cantidad de producto aplicado. ¿Qué quiere decir esto? Que, a la hora de ser aplicado en diferentes zonas, como el rostro, las manos y el cuello, puede ofrecer un aspecto artificial que hará que "se note" que está ahí. Por el contrario, en la aplicación de maquillaje tradicional se puede jugar con el número de capas y la cantidad de producto para conseguir un efecto mucho más natural y, por ello, resulta mucho más fácil conseguir un tono adecuado.
Por último, cuando queremos aplicar el maquillaje mediante un aerógrafo existe el mismo problema que cuando queremos pintar, por ejemplo, en casa. Y es que cuando se va a realizar un trabajo de este tipo debemos cubrir todas aquellas partes de la persona que no queremos que sean manchadas por el producto, es decir, deberemos cubrir ropa y cabello de la misma forma que en nuestra casa cubrimos el suelo y los muebles para evitar mancharlos. Esto, evidentemente, requiere tiempo, y por lo tanto deberemos valorar si nos compensa realizar un maquillado con aerógrafo o, por el contrario, un trabajo más tradicional. En función del tipo de situación en que nos encontremos, maquillar con aerógrafo puede resultarnos mucho más rápido (por ejemplo, cuando se desea maquillar a un gran número de personas), o mucho más lento (en el caso del maquillaje de novias).
¿Y en el campo de la caracterización?
Dentro del ámbito de la caracterización profesional, el uso del aerógrafo está bastante más extendido, aunque como ya hemos comentado, su manejo requiere de algo de capacidad creativa y habilidad para la pintura, ya que se trata, literalmente, de utilizar la piel de la persona como lienzo personal.
A la hora de utilizarlo deberemos tener en cuenta el mismo problema que existía en el maquillaje, y es que deberemos cubrir todas aquellas zonas que no queremos manchar. Sin embargo, debido al tipo de producto aplicado y a la mucha mayor durabilidad que ofrece, se suele aplicar cuando la persona a caracterizar aún no cuenta con el vestuario y peinado que va a utilizar posteriormente, y esto es algo que simplifica este trabajo.
La rapidez de aplicación cuando se desean cubrir grandes extensiones del cuerpo es una de sus principales ventajas. En los trabajos de caracterización profesional, tan solo deberíamos imaginarnos el acabado obtenido y el tiempo empleado para colorear gran parte del cuerpo de una persona (rostro, torso y extremidades visibles) mediante cualquier otro método (maquillaje, ceras...), y el resultado y tiempo empleado con el uso del aerógrafo. Evidentemente, en este último caso, se obtienen unos mejores resultados.
A la hora de crear diferentes patrones, formas o contornos, existe la posibilidad de emplear plantillas que nos facilitarán el trabajo, o nos permitirán realizar el mismo trabajo en diferentes personas.
También permite. Con el manejo y técnica adecuados, crear suaves transiciones de color que de otra forma serían prácticamente imposibles de realizar.
En la actualidad existen gran cantidad de cursos enfocados al aprendizaje en el manejo de esta herramienta tan útil dentro del mundo del maquillado y caracterización profesional que nos proporcionarán los conocimientos y práctica necesarios para incorporar esta técnica en nuestros trabajos.
¿Para qué está indicado el maquillaje con aerógrafo?
Como hemos visto, el maquillaje con aerógrafo, está indicado para aquellas personas que quieren un gran recuerdo o quieren destacar mucho, los primeros serían las novias a o bien las fiestas tradicionales, como la reina del pueblo, falleras, carnavales tradicionales, moros y cristianos, concursos etc…y en el segundo grupo entraría la televisión, cine, teatro, modelaje etc…
Está indicado para personas con el cutis muy estropeado, deshidratado, con manchas o arrugas así como cicatrices que busquen un acabado perfecto y profesional.
Hemos hecho hincapié en el tema del aerógrafo de nuevo porque los maquillajes artísticos profesionales suelen trabajarse con esta técnica, para dar un resultado mucho más llamativo y perfecto.